El joven Borges hace de las caminatas sin rumbo un mecanismo azaroso de su poética. Una noche de 1927 camina hacia el Oeste. Se queda mirando una casa rosada en una esquina y descubre su futura literatura fantástica. En esta caminata buscaremos esa esquina mítica.
«Llevar auriculares y celular cargado»
Punto de encuentro:
Mercedes y San Blas, Floresta
Organiza:
Con el apoyo de: